El Coliseo, Párroco, representantes de las tres Hermandades, Cuarteto de la Banda de Música y algo más de medio centenar de feligreses y cofrades han participado en este acto penitencial
Manuel Carrillo Castillo
El hecho de que vivimos una Semana Santa diferente es una realidad y la Parroquia de Almedinilla quiere estar cerca de los feligreses, ayudándoles a celebrar los Misterios de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo no sólo desde el templo, sino también desde sus hogares, a través de las redes sociales, y espacios abiertos, como el celebrado ayer tarde en el marco incomparable del Coliseo.
Por segundo año consecutivo, no vamos a contemplar las procesiones por las calles de nuestro pueblo, debido a las restricciones sanitarias. Por lo que la Parroquia y los Hermanos Mayores de las Hermandades del Cristo del Amor, Virgen de los Dolores y Jesús Nazareno no quieren dejar de ofrecer diferentes posibilidades para vivirla y redescubrir el significado más profundo de la Semana Santa.

De aquí, el Vía Crucis de ayer tarde por el ruedo del Coliseo, recordando el camino de la Cruz, con público en las gradas y con música en directo, a cargo del Cuarteto de la Banda Municipal de Música, formado por Marta Malagón Atienza (saxofón), Nara Vicente Pulido (clarinete), Belén Ariza Molina (clarinete) y Manuel Bermúdez Molina (tuba), dirigido por su director, José Gabriel Martín Cueto. Interpretaron las marchas “Cristo del Amor”, “Virgen de Gracia” y “Cristo de la Agonía”, con los arreglos de Daniel García de Castro para cuartetos de cuerda y diferentes modalidades .
El resto del acto penitencial giró en torno a las 14 momentos que Cristo padeció con la Cruz a cuestas camino del Calvario, en los que se nos recordaba el difícil trance, junto a profundas reflexiones sobre el dolor y sufrimiento y las peticiones y oraciones para colectivos que están inmersos en la enfermedad, opresión, drogas, sectas, pederastia, pornografía y emigración.