El taller didáctico Infantil “Indumentaria íbera”, Cata dirigida “Los vinos romanos. El alcohol y los virus”, la musealización de la “Tumba de la Necrópolis íbera de los Collados” y “La muerte entre los iberos a la luz de los estudios antropológicos” cumplen con las expectativas de la jornada
Manuel Carrillo Castillo
La cultura íbera estuvo ayer muy presente dentro de las actividades programadas, aunque el comienzo de la jornada fuera propio de la cultura romana, como era la cata dirigida “Los vinos romanos. El alcohol y los virus” a cargo del enotécnico Adolfo Martín Tocón, en el bello enclave del Museo Histórico Fuente Ribera, con pases a las 12:00h y 13:30h.
A las 12:30h, como viene siendo habitual, en el Centro de Recepción de Visitantes, se desarrollaba el taller didáctico infantil “Indumentaria íbera”, dirigido con gran maestría por los técnicos de cultura y turismo José Manuel Córdoba y Paqui Ruiz.
A últimas horas de la tarde, el Cerro de la Cruz, un año más, se convertía en el protagonista de la jornada con la inauguración-musealización “Tumba de la Necrópolis Íbera Los Collados”, a cargo del director del Museo Histórico de Almedinilla, Ignacio Muñiz Jaén. Esta necrópolis fue descubierta por los arqueólogos Maraver y Alfaro a mediados del siglo XIX y localizada el año pasado, tras un proceso de estudio de localización y excavación, encontrándose varias tumbas con restos de cremación y armamento bélico, como la típica falcata que es denominada “Tipo Almedinilla” por museos nacionales e internacionales.
A continuación, la antropóloga física y arqueóloga de la Universidad de Granada, Carmen María Román Muñoz, desarrollaba la conferencia “La muerte entre los iberos a la luz de los estudios antropológicos”, con la gran revelación de los estudios realizados al contenidos las las vasijas que contenían los restos de la cremación de las tumbas 3 y 6 de la necrópolis de los Collados cuyos resultados son los que siguen:
Varón de 25 a 30 años, enterrado con ropa y rotura interior de las falanges de los dedos índice y corazón (Tumba 6). En esta tumba también se encontró una falcata en perfecto estado, punta de lanza, regatón y vaina.
Y mujer con bebé no llegado a término, cuya cremación fue a la misma temperatura, según muestran los restos de ambos (Tumba 3). En esta tumba también se encontraron restos de vestimenta de la mujer y jabalina de hierro doblada.
Concluyó su disertación diciendo que “solo aportaba datos científicos, ya que las interpretaciones son competencias de arqueólogos y expertos”.